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Imagen de Google |
Nadie te llama y vienes
para romper el Aire con tus versos
y me entregas nubes ancestrales
o lumbre de noches dormidas.
Pero sucumbes a la Luna de un cabello
entregando a otra espalda tus dedos.
Te arredran mis labios de escarcha
que jamás pronuncian soles.
Y te me alejas con ojos de hambre
hacia el epicentro de otro vórtice.
Narci M. Ventanas
Hay amores extraños,que llegan sin llamarlos, e igual se van. Bien contado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Triste pero muy bello en tus hermosas palabras.
ResponderEliminarun abrazo muy fuerte.
Maite
Las imágenes visuales logradas son de lujo.
ResponderEliminarBravo, Narci.
Beso inmenso, Poeta Lúdica
SIL
U bello poema , con tristeza muy plasmada y bien escrita.
ResponderEliminarUn abrazo
Saludos fraternos..
Sublime forma de contar unos versos tristes. Pero a la vez vitales que hacen de esta composición un alarde de pensamientos y emociones.
ResponderEliminarBesos para ti Narci.
La verdad hermoso pero no deja de quedar esa tristeza. Muy linda entrada. beso
ResponderEliminarhttp://el-ser-bohemio.blogspot.com
La tristeza ronda, dentro de ella, vive la belleza de tus palabras.
ResponderEliminarAbrazo Narci.
Preciosa esta cascada de versos que se enlazan hasta conseguir un poema de ausencia que duele, como sólo duele el desamor.
ResponderEliminarGracias por tu visita a mi casa.
Me gusta cómo escribes.
Un abrazo.
Magnifico.
ResponderEliminarOtro vórtice que quizá no le llene tanto como este y, sin embargo...
Besos
Simplemente bellísimo.
ResponderEliminarY en medio de esa vorágine,
a veces, terminamos desapareciendo
en nuestra propia ausencia.
Un abrazo
Sigo pensando que los poemas deben de ser tristes ya que en ellos se refleja la belleza de los sentimientos y de las palabras echas letras.
ResponderEliminarComo siempre FANASTICA!!!!!!!!!!!
Besazos Cielo!!!!!!
Un encuentro que habla de desencuentros. Un poema claro y certero.
ResponderEliminarCon el buen hacer de tus versos, Narci.
Un abrazo grande de Mos.
Pues yo vengo porque me llamas, y aunque no me llames regreso, de a poco, de a días, de a tiempo...
ResponderEliminarTus labios, nunca de escarcha, saben y dicen, y no se desintegran en el agua de otra noche, siempre llueven con luz tus palabras.
Un beso
A veces no necesitamos oír esa llamada, sólo es importante seguir el eco del corazón.
ResponderEliminar(Gracias por llegar a mi blog y leerme, por tus comentarios tan generosos)
Un abrazo, Pilar
Un poema maravilloso, triste pero no quita nada su belleza.
ResponderEliminarBesos
Narci:
ResponderEliminarmaravillosos versos.
es un placer leerte amiga.
bellisímo.
besos
Bellas palabras que cuentan una historia de ¿desamor?... Merece al menos una segunda parte.
ResponderEliminarUn saludo.
Amores que vienen
ResponderEliminary van como las olas
que besan la arena
y se alejan.
Besos
Desbordan emoción los versos, el temblor de un gran sentimiento llega hasta mis ojos.
ResponderEliminarFelicidades, hermoso poema.
Un abrazo.
Me alegra mucho que hayas vueltyo Narci, tus versos son profundos.
ResponderEliminarUn abrazo
El amor es asì, a veces. Està en movimiento. Pleno de contradicciones.
ResponderEliminarEsta vivo.
Buen poema.
Un abrazo.
Muy bonito el poema
ResponderEliminarun placer pasar a leerte.
Que tengas un feliz fin de semana.
un abrazo.
...entregando a otra espalda tus dedos.
ResponderEliminarCreo que es uno de los versos más hermosos que he leido. Precioso de veras, Narci!
Besos!!
Nadie te llama y vienes, pero luego te vas y me dejas... Extraño, pero cierto.
ResponderEliminarSentidas letras Narci.
Te dejo un beso.
AUSENCIA
ResponderEliminarEl alba abre su abanico,
evapora la noche,
pone llamas en mi rostro.
Con qué acuñar
el arsenal de gritos sumergido en mi voz.
Con qué amarrar esta turbulencia traicionera.
El día avanza,
nada me incorpora.
Lluve en mi memoria
o es tu arrullo lo que suena?
Una mariposa se posa en mis labios
para callar tu nombre.
Triunfa el silencio.
Qué he de poner sobre tu pedestal vacío?
anuar iván.
Y tras meses de ausencia,vuelvo, vuelvo a tu casa de letras y leo, en la luz de unos versos preñados con afanes que buscan un lugar donde salvar los inviernos.
ResponderEliminarUn abrazo Narci