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¡Magia certera!
He visto un par de orejas
en la chistera.
Es un conejo
juguetón y travieso
¡cómo me enreda!
Me toma el pelo
moviendo los bigotes
con gran salero.
Me guiña un ojo
con cara picarona.
Yo me sonrojo.
Me he enamorado
del arte de un conejo
blanco y rosado.
Narci M. Ventanas.
Más MAGIA en el Blog de Sindel.
Y a mi me encanta este poema tan mágico:)
ResponderEliminarLe ponemos música y lo cantamos.
Besos
Vale Trini, cuando queramos que llueva, yo canto.
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ains si te digo que me enamoré (hace unos cuantos años) de un conejo blanco :P
ResponderEliminarbesos magicos
La magia del amor, MaRía, la magia del amor, cualquier cosa puede ocurrir.
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Yo también me he enamorado, el conejo es pura alegría. Un abrazo
ResponderEliminarPues ponte ala cola Ester, que en el amor, 3 son multitud.
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Espero que sigas enamorada, de la vida.
ResponderEliminarBesos,
Mi relación con la vida siempre ha sido de amor-odio, Sau, pero con un poco de humor, las penas son menos, y tú de eso entiendes mucho.
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Que lindo! Tiene un toque infantil que me da ternura!
ResponderEliminarMagia es leerte y descubrir que siempre me sorprendes!
Un beso.
Sindel, espero que sean sorpresas de las agradables, porque si son sustos, mañana mismo dejo de escribir, o de intentar escribir.
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Que lindas rimas! Con humor y mucha magia. Hermosa creatividad.
ResponderEliminarSaludos
Sobre todo con humor, el mejor refugio cuando lo que faltan son ideas, jeje.
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Narci, nos dejas un poema gracioso y juguetón como el conejo de la chistera...Muy bonito, amiga.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo grande.
M.Jesus
Gracias Mª Jesús, si es así, he logrado mi propósito.
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Querida Narci en tus palabras hay esa magia de quien todavía se sorprende por las pequeñas cosas de la vida como los niños que todo lo ven mágico.
ResponderEliminarBesos
Quizá de tanto estar con niños, algo se me ha contagiado, Ilesin. Todo se pega menos la hermosura.
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Preciosas coplillas con el tema de la magia, querida Narci, te han salido redondas de la chistera.
ResponderEliminarFelicidades y besos de buenas noches
A falta de chistera, un teclado ya me vale, María Bote. Todo sea para que la magia del amor perdure y dure y dure y dure...
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Para sonreir
ResponderEliminarcon la magia de estos versos.
Un abrazo muy grande Narci
Pues una sonrisa nunca viene mal, Marisa, al menos a mí.
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Me encanta!! Es simpático y muy bueno.
ResponderEliminarBesos
Gracias, Pamela, y bienvenida a mi blog.
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Me ha gustado mucho la magia de tu chistera.
ResponderEliminarQué nunca nos falte algo de magia, Tracy, venga de donde venga.
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Me hago pequeñita con tu magia y me pongo a jugar con tu conejo saleroso...Cuántas veces necesitamos olvidarnos del peso de la vida...
ResponderEliminar¡Qué bonito! ¿Sabes que sería una preciosa canción infantil?
BESINESSSS
Pues pensándolo bien, Volarela, quizá se la enseñe a mis nene el curso que viene si es que tengo y trabajo.
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Simpático, si, hace sonreír y pensar que en esa chistera hay más.
ResponderEliminarSaludos Narci.
Mucho más, Beatriz, mucho más, conejos, palomas, pañuelos, escaleras al cielo..., y sobre todo mucha mucha ilusión e ilusionismo.
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Esos conejitos de la galera, dan brincos y regalan alegría.
ResponderEliminarUn poema que se me antojaría compartir con los niños, y enseñarles ante todo, que la magia existe en las pequeñas cosas de la vida. ;)
Besos!
Gaby*
Magia de esas que hacen brillar nuestros ojos, feliz semana amiga
ResponderEliminarTras la aparente sencillez, casi como un juego de tu poema, hay una poesía fresca, elaborada, rica en imágenes. Me encantó la magia y la ternura que desprende ese conejo juguetón.
ResponderEliminarUn abrazo.