Imagen tomada de google |
Late un suspiro de otoño en el corazón de cada gota de lluvia que besa la tierra.
Palpita un corazón en cada soplo de viento que empuja las nubes.
Y en cada soplo sangrante de miedo,
se marchita el segundo
y las horas...
se azoran los días y cabalgan
cabalgan y trotan
galopan
los sueños
la dicha y la vida
la fe,
la pasión y el amor
la palabra
el silencio y la magia
el beso
el recuerdo, el adiós...
Pero un suspiro de otoño
late en el corazón de cada gota de lluvia que besa la tierra.
Narci M. Ventanas
Para bien o para mal, el ciclo del amor y de la vida se repite si Dios quiere a perpetuidad. En aprender a disfrutar cada etapa de neustro ciclo está el verdadero arte de vivir, aprender a ser felices con lo que somos, con lo que hemos sido. Es algo difícil, pero ahí está el reto.
ResponderEliminarUn gran abrazo Narci ¡qué bueno que hayas vuelto!
Realmente difícil, Drac, tanto que a veces nos resulta imposible. Besos.
EliminarPrecioso este tu discurrir del tiempo lleno de sensibilidad en un hermoso poema bucólico en un bello suspiro de otoño.
ResponderEliminarBesos.
El otoño siempre he huele a suspiro, a suspiro de alma que se despereza justo antes de rendirse al sosiego de la lluvia.
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Las gotas hacen que halla esperanza en la tierra. Bellos versos. Besos
ResponderEliminarEl agua es fuente de vida y consecuentemente, de esperanza.
EliminarBesos
Cuanta vida trae una gota, como una caricia, como una sonrisa, como un nuevo amanecer, como una melodía, como un beso...
ResponderEliminarBesos,
Y hasta los besos precisan del agua para ser plenos y jugosos.
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Así sea, querida Narci, que el otoño suspire en cada gota de lluvia borrando adioses y haga renacer la esperanza.
ResponderEliminarPreciosos versos, amiga mía, preciosos!!
Un beso enorme y mis gracias!!
Así sea, Lucía, que nunca nos falten los otoños, ni los suspiros.
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Lluvia de palabras al ritmo del latir del tiempo... y siempre nos quedará la esperanza ( o París).
ResponderEliminarbesos
Sin esperanza, ni París sería lo que es.
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Un suspiro otoñal hecho poema o, a la inversa, Narci. Precioso, amiga.
ResponderEliminarFelicidades y besos de buenas noches.
María
O ambas cosas al tiempo, María: suspiro, otoño y poema, tres conceptos y un único sentimiento.
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Bello poema, gran sensibilidad desprenden tus letras.Me encanta la imagen, repletita de vida.Me encantó pasar por aquí.Besitos.
ResponderEliminarMe encantó encontrarte en mi rinconcito.
EliminarGracias por venir.
Besos
Pues que ese suspiro de otoño haga que todo brote y dejen de marchitarse los segundos y las horas. Y que los sueños galopen cuanto quieran pero que vuelvan al hogar de nuestra vida; al calor de nuestro corazón.
ResponderEliminarNarci, maestra, poeta. Me quedo con ese soplo,ese suspiro que late en otoño.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Qué galopen los sueños, sí, y que la vida nos sea pródiga en suspiros y en versos.
EliminarUn fuerte abrazo, Mos.
Besos
Parece caer la fina lluvia buscando el corazón de la tierra en tu bello poema. besos
ResponderEliminarGracias, Carver. Ningún corazón debería secarse nunca, y menos aún el de la tierra, por eso la lluvia no es tan indispensable.
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Es la magia de la lluvia
ResponderEliminarque florece en otoño
suspiros de primavera.
Un gran abrazo
La magia de la lluvia y de la vida que se renueva.
EliminarAbrazos para ti también Marisa.
Cuánta belleza encerrada en tus versos!!
ResponderEliminarBesos.
Gracias, Mayte.
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Un suspiro de otoño que donará vida, con sus gotas, a todo un año.
ResponderEliminarEste poema tiene algo que vivifica. demás de ser precioso. Gracias
Besos
Gracias Trini, escribirlo al menos, ha sido vivificante para mí, espero que un poco de esa vida os llegue a través de mis versos.
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"un suspiro de otoño
ResponderEliminarlate en el corazón de cada gota de lluvia que besa la tierra",
una metáfora bellísima,un final gran final lleno de esperanza.
Besos
Gracias Mª Teresa.
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Hermoso!, tal como es la vida misma.Cuantos suspiros, cuantos otoños.
ResponderEliminarMuchos abrazos.
Gracias Rayen.
EliminarLa vida a veces es hermosa, otras no tanto, pero siempre nos quedará algo a lo que aferrarnos, aunque sólo sea un suspiro, una gota de lluvia o un puñado de versos.
Besos
Narci,gracias por tu visita a miga.Pinchando en tu nombre no se puede entrar al blog...He de buscarte en el escritorio,pero aquí estoy y me alegro mucho por ello.
ResponderEliminarEs un gran poema el que nos dejas,somos como ese tallo de la tierra, que necesita la gota de lluvia y el corazón del viento para sentir la vida...La vida escapa y nos lleva por delante...Pero,de nuevo llega esa lluvia de otoño para darnos fuerza y ese abrazo de viento para darnos esperanza...La misma,que tú nos dejas en tu poema,amiga.
Mi felicitación y mi abrazo inmenso por esa sensibilidad clara y mágica.
Mi abrazo grande y feliz fin de semana,poeta y amiga.
M.Jesús
Me encantaaaaa. Una auténtica belleza de versos. Me dejas estremecida con ese suspiro...¡Cómo escribes!
ResponderEliminarYo sí que te felicito a ti :)
En cada línea que se derrama en cascada, ahí es donde late, Narci.
ResponderEliminarEn cada uno de tus versos.
Mil besos.
SIL
Hola, me gusta mucho tu blog, lo visito regularmente y me parece muy ameno e interesante.Te felicito por tu gran trabajo, es un gusto pasar por aquí.
ResponderEliminarUn gran saludo desde:
http://leyendas-de-oriente.blogspot.com/
Despuės de leer y disfrutar de tu poema...comprendo por qué me agrada tanto la lluvia otoñal...
ResponderEliminarBesos
la gota trae a vida y la esperanza
ResponderEliminarwww.animoyesperanza.com
Preciosos versos, la sensibilidad del otoño y el atractivo de la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.