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que exhalan hoy mis poros más ciegos.
Esta fragancia maldita
que no logro aplacar con tu lluvia.
Este perfume bendito
que me abraza al sueño
como llama eterna...
¿Luna Muerta generando vida?
¿Vida Exhausta que la muerte espera?
Este ocre sabor que mastico
como fruta agria
entre lengua y encías.
Este plácido manjar funesto
que lamen mis dientes
sin tiempo ni prisa
¿Será la muerte de un Viento perpetuo?
¿Será de Fénix el renacer?
¿Será la brisa?
¡Aroma ninfo de Sangre y Ceniza!
Narci M. Ventanas
Este poema parece de los nuevos, dime si me equivoco. Lo sea o no, tiene una expresividad distinta, y leerlo es menos una conmoción y más un dialogo interno.
ResponderEliminarEs del 2 de febrero del 96, pertenece a un poemario llamado Erebo y la Noche, igual que todos desde "dedo a dedo".
ResponderEliminarCreo que en realidad casi todos son un diálogo interno, sea cual sea su capacidad para conmocionar.
Gracias por leerme.
Narci